¿Qué te llevó a ser diseñadora?
Esa pregunta me colocó a reflexionar… creo que fue influencia de mi madre. Crecí alrededor de muchas personas creativas, tíos que dibujaban, con amigos músicos, pero lamentablemente todos frustrados con sus resultados profesionales no por la falta de talento o esperanza, pero sí de acceso. Acceso que yo tuve y siempre que es posible intento aprovechar todo. Todavía es raro verme como una profesional de la industria creativa, pero con los desafíos diarios me siento orgullosa de honrar a mis ancestros ocupando espacios inimaginables en otras generaciones.
¿Qué es lo que te inspira para crear?
Creo que mi gran inspiración está super clara, crecí con mi abuela que me enseñó cuando era chica a coser, bordar y hacer diversas actividades manuales, y esa gran influencia sigue presente en mi trabajo. De adulta me crucé con un párrafo de un texto de Elena Barnabé que dice «Abuela, ¿cómo lidiar con el dolor?» «Con las manos, querida.» Haciendo esto con la mente, el dolor no disminuí, endureció todavía más, pero solo reforzó mi poder creativo
¿Cómo es tu día típico de trabajo?
No tengo un día típico de trabajo, siendo autónoma y trabajando con varios tipos de proyectos (desde libros y portadas hasta sitios web) tengo siempre que ir adaptándome a la realidad del cliente, las restricciones del proyecto y a las necesidades de cada ONG. Siento que trabajar así es un buen ejercicio para lidiar mejor emocionalmente con las incertidumbres de la vida.
¿Qué significa para ti ser una mujer latina en la industria del diseño?
Para mí significa enfrentar desafíos diarios. Sea en lograr un espacio en la industria, sea mantener mi integridad cuando me cruzo con las necesidades creadas por el sistema capitalista. En los últimos años tuve la suerte de encontrarme con clientes geniales, ONGs que ejercen un trabajo necesario localmente y creo que es de estas mujeres que yo consigo mi fuerza para enfrentar tales desafíos.
¿Qué sueñas lograr en tu carrera?
No tengo sueños profesionales, pero hoy mi meta es cambiar para el área de tecnología y conseguir una cierta estabilidad financiera para lograr seguir con mis estudios 🙂 pienso que el conocimiento en UI/UX me será útil ahora que estoy cursando un segundo grado en ciencias socioambientales.
¿Qué consejos darías a aquellas mujeres latinas que quieren entrar en la industria del diseño?
Pienso que el gran consejo (sin promocionar la meritocracia) es: si lo quieres, necesitas moverte. Lamentablemente no será fácil, por lo menos no será tan fácil como resulta para los hombres, pero si es algo que quieres, será gratificante.